Justicia y Paz: Declaración final del Seminario Internacional de Berlín

Conferencia de Comisiones de Justicia y Paz de Europa

Un Reto para las Sociedades Europeas: Superar un Pasado Violento y las Secuelas de la Dictadura

Declaración Final del Seminario Internacional de Berlín

Del 20 al 22 de septiembre de 2013

El trabajo por la paz nos llama a un compromiso valiente con la realidad y la amenaza de la violencia – pasada, presente y futura. En la Europa de hoy en día la violencia de nuestro pasado pesa sobre el presente y sigue proyectando sombras sobre nuestro futuro. Para tratar de entender mejor las causas y consecuencias de esta violencia, la Conferencia de Comisiones de Justicia y Paz de Europa ha llevado a cabo en Berlín, del 20 al 22 septiembre de 2013, una reflexión sobre estos asuntos desde las experiencias concretas de Alemania.

Nuestro enfoque particular ha sido la violencia de la dictadura, la instrumentalización política del terror y la opresión, y las terribles consecuencias de la agresión de la guerra desatada por el régimen nazi. El análisis abarcó diferentes tipos de régimen, ideología y métodos. Esto nos ha llevado al que fue campo de concentración de Sachsenhausen, a la exposición Topografía del Terror en la antigua sede de la Gestapo, al museo de la Stasi, anterior cárcel de la Stasi en Hohenschönhausen, y al lugar de la futura exposición Vuelo, Expulsión y Reconciliación sobre la situación de los refugiados en Europa durante el siglo XX. A través de estas visitas, y las contribuciones de los expertos líderes en el campo, hemos profundizado nuestra comprensión sobre la naturaleza de este tipo de violencia y su impacto en las personas afectadas. Esto a su vez nos ha llevado a considerar las implicaciones actuales de este pasado, y las lecciones que debemos aprender de él para el futuro.

Durante nuestros días aquí, volviendo a trazar los pasos de las víctimas y los verdugos, la conclusión ineludible ha sido la centralidad de la dignidad humana para la paz, la justicia y la reconciliación. Reflexionando sobre el terror y la violencia a través de los ojos de las víctimas, los brutales efectos son evidentes – la destrucción de la auto-imagen de la persona, la seguridad y la conexión con la sociedad. Al ser llamados a reflexionar sobre la perspectiva de los verdugos, hemos visto también cómo la práctica de la violencia va en detrimento de la dignidad humana, obligándonos a posicionarnos tras la aceptación acrítica de normas y sistemas, pasando a formar parte de la maquinaria.

Se deduce entonces que la base sobre la que descansan todos los demás derechos humanos, la dignidad humana, debe ser el valor guía en nuestro acercamiento a los desafíos del pasado, presente y futuro. La restauración de la dignidad de las víctimas exige que escuchemos con compasión y apertura sus necesidades y exige mantenerlas en el centro de las propuestas de reconciliación. Todas las sociedades que emergen de un conflicto tienen una gran deuda de gratitud con aquellos que llevan su sufrimiento con dignidad y trabajan por el bien común de la sociedad. Existe la necesidad de garantizar que este sufrimiento no sea explotado por aquellos que desean prolongar conflictos o exacerbar las divisiones dentro de la sociedad o entre naciones, utilizando el pasado como un campo de batalla para el presente.

En este proceso hemos sido confrontados con la verdad incómoda de que la mayoría de los responsables del genocidio de los judíos en Europa no han sido llevados ante la justicia.

La mayor parte de los nazis, comunistas y otros autores de crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y abusos de los derechos humanos tampoco han rendido cuentas de sus actos. Aunque nada puede compensar adecuadamente a las víctimas por lo que han sufrido, la obra de la reconciliación no puede quedarse en algo abstracto. Tiene que basarse en un análisis concreto, que exponga y tenga en cuenta los diferentes niveles de responsabilidad, siempre con una referencia más cercana a las necesidades de las víctimas y las comunidades afectadas.

Si bien no puede haber un proyecto de reconciliación, se pueden identificar algunas claras salvaguardias contra el abuso del término. Los procesos fundados en olvidar el pasado o bloquear la búsqueda de las víctimas para la verdad y el reconocimiento representan un asalto más a su dignidad humana. También se debe evitar la generalización de la culpa sin tener en cuenta los diferentes niveles de responsabilidad y el contexto en el que las acciones específicas se llevaron a cabo.

Abordar estas heridas del pasado representa un desafío para todos nosotros a nivel personal, social y nacional. Una apertura al análisis autocrítico es vital para este proceso. La reconciliación exige superar la ruptura de la confianza y restaurar y renovar las relaciones sobre la base del respeto mutuo. El miedo es a menudo un obstáculo importante en este proceso. Como individuos y grupos podemos tener miedo de exponer nuestras propias debilidades. Podemos dudar en reclamar la responsabilidad de nuestra parte en la violencia del pasado, en ausencia de la certeza de que los demás harán lo mismo.

Las iglesias tienen un papel importante que desempeñar en establecer el marco moral en el que puede explorarse y comprenderse la verdad sobre el pasado. Las iglesias deben dar ejemplo en este sentido participando en el análisis autocrítico de su propio papel, en el momento, antes, durante y después de la dictadura, basado en los valores de la verdad, la justicia y la solidaridad. Por encima de todo, las iglesias pueden señalar el camino al perdón, que ofrece la oportunidad de una nueva libertad y una profunda renovación de las relaciones. Reconocemos que el proceso de aprendizaje que hemos experimentado aquí en Berlín es parte de un proceso más amplio de aprendizaje en la Iglesia acerca de la historia, la memoria y la reconciliación. Una de las expresiones más fuertes de este proceso vino de Papa Juan Pablo II en la homilía por el Día del Perdón (12 de marzo de 2000) cuando invitó a reconocer “nuestra responsabilidad como cristianos por los males de hoy en día”, pidiendo perdón por nuestra parte en la injusticia y ofreciendo perdón para esas injusticias que otros nos han infligido. En la prisión de Plötzensee recordamos el sacrificio del Padre. Alfred Delp SJ y Helmuth von Moltke, que fueron ejecutados porque sus valores cristianos eran incompatibles con las prácticas del régimen nazi.

Nuestra experiencia aquí ha confirmado el valor de la contribución hecha desde los distintos lugares conmemorativos y proyectos históricos que visitamos. Tales oportunidades educativas son de especial valor para las generaciones futuras, que de otra manera no tendrían la oportunidad de obtener una comprensión de estos eventos. Fundamentalmente, ofrecen un espacio en el que podemos educar tanto los corazones como las mentes. La experiencia de la dictadura y la guerra, donde las personas altamente educadas simplemente siguieron la lógica del sistema, es una poderosa ilustración de que la educación formal, no va a proporcionar necesariamente todas las herramientas que necesitamos para un profundo reconocimiento de la humanidad de los demás.

Nuestras experiencias en Berlín durante este seminario nos han desafiado como participantes al análisis autocrítico de nuestras reacciones ante las ofensas contra la dignidad de la persona humana en la actualidad. Reconocemos que hay lugares en nuestras sociedades donde las personas se mantienen en los márgenes, lugares que pueden, en un futuro, convertirse en memoriales de los abusos de derechos humanos. ¿Estamos simplemente esperando mientras se ofende e ignora la dignidad de los demás?

Por último, hay que reconocer que el recuerdo de ese pasado no sólo es doloroso. Nos hemos inspirado en el ejemplo de aquellos que lucharon por preservar su dignidad y la de los demás seres humanos en las condiciones más inhumanas. Se nos recuerda que incluso las dictaduras aparentemente impenetrables pueden caer y que se pueden construir nuevas relaciones a su paso. Esto se puede ver, no sólo en la historia de las naciones individuales, sino también en el proyecto más amplio de la propia Unión Europea. Estas experiencias deberían dar esperanza a otros países que están actualmente experimentando conflictos violentos, o que están emergiendo de ellos.

La Conferencia de Comisiones de Justicia y Paz de Europa desea expresar un sincero agradecimiento a todos los que hicieron posible esta experiencia: nuestros anfitriones, la Comisión alemana de Justicia y Paz; la capellanía militar de Alemania por su generoso apoyo a nuestro programa; las Fundaciones de Maximiliano Kolbe y a todos nuestros compañeros de diálogo, en especial la comunidad de Regina Martyrum, donde celebramos el momento simbólico central de nuestro seminario.

La Declaración final del Seminario se encuentra en el siguiente enlace

Para más información, contactar con: Isabel Cuenca Anaya

Secretaria General de la Justicia y la Paz de España

Rafael de Riego, 16, 3º dcha. • 28045 Madrid

Tel. (+34) 91 506 18 28 • Correo-e: juspax@juspax-es.org

 

Justicia y Paz: Comunicado en relación con la guerra en Siria.

Con ocasión de los graves sucesos de guerra que tienen lugar en Siria, la Comisión General de Justicia y Paz de España quiere manifestar:

El horror e indignación por la utilización de armas químicas en el conflicto, que han producido la muerte de centenares de personas, mayoritariamente entre la población civil. En caso de confirmarse este hecho, absolutamente inadmisible, consideramos que se trata de crímenes de guerra gravísimos, cuya autoría y circunstancias deben ser investigadas por organismos independientes y cuyos responsables deberán ser juzgados por tribunales de justicia imparciales o por el Tribunal Penal Internacional.

La Comunidad Internacional no puede admitir estos crímenes y debe tomar todas las medidas políticas, jurídicas y diplomáticas necesarias para evitar su repetición y asegurar el castigo de los responsables, además de trabajar para la resolución del conflicto. No obstante, consideramos un grave error responder mediante el bombardeo o ataque armado – de consecuencias imprevisibles – a uno de los contendientes, ya que dicho ataque ocasionará más víctimas inocentes y el empeoramiento de la situación. Pedimos al Gobierno español que no colabore ni apoye ninguna actuación en este sentido.

Igualmente, queremos manifestar nuestra profunda tristeza por la magnitud de la mortalidad y la destrucción que está generando este trágico conflicto, así como nuestra solidaridad y oración por el sufrimiento de todas las víctimas. Pedimos a las partes enfrentadas y actores implicados que cesen de inmediato las hostilidades y se esfuercen por alcanzar una paz justa mediante el diálogo. En este sentido, unimos nuestra voz a la del Papa Francisco, que ha exhortado a la Comunidad Internacional “a hacer todos los esfuerzos para promover sin vacilaciones las iniciativas de paz” en Siria. “El uso de la violencia no trae la paz. La guerra llama a la guerra. La violencia llama a la violencia”, señaló y, por ello, nos unimos a su convocatoria para celebrar el próximo 7 de septiembre una jornada de ayuno y de oración por la paz en este país.

Madrid, 2 de septiembre de 2013

 

Justicia y Paz: Nota de prensa Jornada anual de la Comisión General de Justicia y Paz

Los días 12 y 13 de abril se celebró, en el Teatro Principal de Burgos, la Jornada anual de la Comisión General de Justicia y Paz, bajo el titulo “CRISIS Y DERECHO AL TRABAJO”. A esta jornada han asistido un gran número de comisiones de Justicia y Paz de todo el territorio estatal y numeroso público.

Un total de 10 ponentes realizaron sus exposiciones mediante conferencias y mesas redondas, analizando el origen y causas de la situación actual, así como la repercusión de la crisis con respecto al derecho al trabajo. Estas reflexiones dieron lugar a su vez a propuestas y alternativas para una sociedad más justa.

Entre otras cuestiones, se hizo hincapié, en el trabajo como un derecho imprescindible para el desarrollo integral de la persona, que de esta manera participa activamente en la construcción de la sociedad; así como la diferencia entre trabajo y empleo, teniendo este último un único objetivo económico.

En todo momento el trabajo ha de respetar la dignidad de la persona y potenciar todas sus capacidades personales y relacionales. La actual crisis está fomentando una situación de deterioro muy grave en los derechos del trabajo.

El trabajador no puede ser contemplado como un mero instrumento para la competitividad, ya que el centro de la economía ha de ser la persona y no el beneficio. Se precisa por tanto un profundo cambio en el modelo económico actual. En todos estos aspectos la Doctrina Social de la Iglesia hace importantes aportaciones que alumbraron las jornadas.

La clausura de los actos tuvo lugar el sábado por la tarde a cargo de Mons. Santiago Gómez, obispo acompañante de la Comisión General de Justicia y Paz, Ángel Ballesteros, miembro de la Comisión Diocesana de Justicia y Paz de Burgos y Eduard Ibáñez, presidente de la Comisión General de Justicia y Paz, animando a los presentes a continuar profundizando en este tema, que hoy en día tiene una incidencia tan fundamental en la vida de millones de personas.

 

Pueden consultar: Enlace y ponencias

 

Jornada anual de la Comisión General de Justicia y Paz.

Bajo el lema “Crisis y derecho al trabajo” se celebrará en Burgos los próximos 12 y 13 de abril de 2013 la Jornada anual de la Comisión General de Justicia y Paz.

Empezará el día 12 a las 19.30 con la recepción de los participantes y la conferencia inaugural, “La crisis: situación actual y alternativas”, de mano de Arcadi Oliveres, presidente Justicia y Paz Barcelona.

Ya el sábado 13, habrá una serie de ponencias, mesas redondas y coloquios con los siguientes temas:

  • “¿Qué hacemos con el trabajo?”.Juan José Castillo, catedrático de Sociología de la U. Complutense de Madrid. Co-director de la revista Sociología del Trabajo. Director del Grupo de Investigación en Ciencias Sociales del Trabajo “Charles Babbage”, UCM.
  • “El impacto de las últimas reformas laborales en el Derecho del Trabajo y el derecho al trabajo”.Eduardo Rojo, catedrático de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la U. de Barcelona. Vicepresidente de la Fundación Utopía-Joan N. García Nieto.
  •  “Perspectivas y propuestas”.Octavio Granado, ex-secretario de Estado de la Seguridad Social. Luis Miguel Pariza, consejero en el CES Europeo en representación de CCOO.Marta Ordóñez, Fundación Alter, Alteraudio.
  •  “Derecho al trabajo y exclusión social”.Laura Andrés, técnico del equipo de promoción de derechos y economía solidaria. Cáritas española.Henar Hernández, técnico del programa de empleo. Cáritas Diocesana de Burgos.
  •  “El derecho al trabajo en la Doctrina Social de la Iglesia: planteamiento y contraste con la realidad”.Fernando García Cadiñanos, profesor DSI. Facultad de Teología de Burgos.Francisco Javier García Cadiñanos, sacerdote diocesano y consiliario JOC de Burgos.

Es necesaria inscripción previa mediante formulario, que junto al justificante bancario, se enviará a la cuenta de correo electrónico internacional1@juspax-es.org, antes del día 5 de abril. Pueden encontrar más información a través del teléfono 915061828 y los e-mail: internacional1@juspax-es.org y juspax@juspax-es.org

Justicia y Paz: Informe final de conclusiones de las consultas Post-2015

En 2012, a solo 3 años de la fecha límite para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), Naciones Unidas inició un proceso de consultas para debatir la agenda de desarrollo post-2015, que se implementó en España, por la Campaña del Milenio, por mandato del secretario general de Naciones Unidas sobre los cuatro temas claves: juventud, medioambiente y sostenibilidad y desarrollo.

El objetivo de estas consultas radicaba en facilitar un espacio de diálogo para que la sociedad civil española pudiera definir y consensuar sus prioridades de cara a la futura agenda de desarrollo. Prioridades que serían después trasladas a Naciones Unidas y a las plataformas internacionales de la sociedad civil.

El 17 de octubre de 2012, la Comisión General de Justicia y Paz, entre más de 100 organizaciones, participamos, en Madrid, en la Consulta #Post2015 de Naciones Unidas con Sociedad Civil en España y ahora recibimos desde la Campaña del Milenio de Naciones Unidas, el Informe Final de Conclusiones de las Consultas Post-2015 con la Sociedad Civil en España.

El Informe recoge la visión y las propuestas de más de 100 organizaciones de la sociedad civil en España para la nueva agenda del desarrollo más allá del 2015.

Desde la Campaña del Milenio trasladaremos estas propuestas a Naciones Unidas y a la sociedad civil internacional. Agradeceríamos mucho que le dieras la máxima difusión a estas propuestas entre tus socios y redes.

Campaña Europea por el domingo libre

En estos difíciles tiempos de inseguridad económica demasiados trabajadores y empleadores se encuentran presionados y nuestra sociedad pasa por alto la importancia del tiempo libre y la participación de los ciudadanos en la sociedad. En cuanto a la reducción actual de las políticas sociales, ¡es importante que se escuche nuestra voz a favor de unos tiempos de trabajo decentes!

La sincronización del horario de trabajo: Las prácticas actuales y la legislación de la UE y de los Estados miembros tienen que ser mejoradas. La sincronización del horario de trabajo, incluyendo el descanso dominical, es crucial. Sólo en tal caso pueden promoverse la salud, la seguridad y la dignidad de todos los ciudadanos. Sólo de esta manera podrán todos los ciudadanos conciliar su vida personal, familiar y profesional. Sólo así se garantiza la cohesión social, ya que permite a las personas, empleadores y empleados, reunirse.

2013: Año Europeo de los Ciudadanos: Ya sea para el enriquecimiento cultural o el bienestar espiritual, o para que la gente asista a los servicios religiosos, a clubes deportivos, eventos familiares u organizaciones de la sociedad civil: ¡la ciudadanía merece tiempo! El descanso dominical, así como la sincronización del horario de trabajo son una demostración clara y visible de que la gente y nuestras sociedades no dependen solamente del trabajo y la economía.

¡Más que nunca, en el 2013, nuestra Alianza pide a los miembros, simpatizantes y a todos los ciudadanos que hagamos visible nuestra demanda común el domingo 3 de marzo de 2013!

Ya hay alianzas dominicales en algunos Estados miembros de la UE, que han tenido esta tradición durante varios años. Cualquier acción o debate político que se desee organizar será decisión de cada organización. La visibilidad de este domingo especial no dependerá sólo de un “gran evento”, sino también de las ideas y proyectos innovadores que reflejan la cultura local y regional y las tradiciones europeas. Esta idea de un Día Europeo sobre el descanso dominical se intensificará de un año para otro.

Son varias las asociaciones del Foro de Laicos que apoyan esta iniciativa, por ejemplo, Justicia y Paz, y pueden encontrar más información aquí:

https://www.europeansundayalliance.eu/

https://www.juspax-es.org/uploads/documentos/aca21c415cdb7d4ac9493d87530e1621.pdf

 

Comunicado de la Comisión General de Justicia y Paz en relación con la nueva reforma del Código Penal.

En relación con la intención anunciada por el Gobierno de reformar nuevamente el Código Penal a fin de introducir, entre otras modificaciones, las figuras de la “prisión permanente revisable” y la “custodia de seguridad” de hasta diez años, la Comisión General de Justicia y Paz desea expresar:

1. La prisión permanente o perpetua es una pena cruel e inhumana porque impone un sufrimiento terrible a un ser humano, le aparta definitivamente de la sociedad, le somete a un aislamiento que destruye su condición de ser relacional y agrede profunda e irreversiblemente su salud mental, física, espiritual y su dignidad moral. Además, la prisión de por vida desprecia la condición siempre perfectible del ser humano y la posibilidad del perdón. No se debe negar nunca la posibilidad de que una persona que haya cometido graves crímenes se transforme interiormente, como fruto de un proceso libre y de un apoyo adecuado, para arrepentirse, reparar en lo posible el daño causado, reintegrarse socialmente y abrirse a amar.

2. Por todo ello, la prisión permanente es inconstitucional, ya que infringe la prohibición de penas inhumanas o degradantes (art. 15 Const.) y la exigencia de que las penas se orienten a la reinserción social del condenado (art. 25.2 Const.), un principio básico de humanidad y de justicia social. Encarcelar de por vida significa renunciar oficialmente a la reinserción. La reintroducción de esta pena es un grave retroceso en la necesaria evolución hacia un sistema de justicia penal más justo, más respetuoso de la dignidad humana y orientado a la consecución de la reintegración social de los penados.

3. El hecho de que sea “revisable”, es decir, que se pueda dejar sin efecto en determinadas condiciones, no elimina su crueldad ni su inhumanidad, ya que no impide que pueda ser mantenida prácticamente hasta el final de la vida. Obtener la libertad quedará pendiente de una decisión sobre la personalidad del penado que se convertirá fácilmente (e inevitablemente) en un juicio arbitrario. La decisión de liberar ya no se basará sobre la verdad de un hecho del pasado (delito cometido) sino en una hipótesis sobre la reincidencia futura o un juicio subjetivo sobre la moralidad de la persona o una respuesta política a las demandas de las víctimas o de la opinión pública. La conducta de la persona es imposible de prever a priori (porque entra en juego la libertad) y, por tanto, cualquier hipótesis de comportamientos futuros carece de toda base científica objetiva. Esta arbitrariedad es también la que conllevará la nueva medida de custodia de hasta diez años de prisión.

4. En cualquier caso, es una pena y un sufrimiento socialmente innecesario, porque su previsión legal y su imposición no tendrá más efectos preventivos del delito que la imposición de penas graves de duración determinada como las que prevé actualmente la ley vigente, que pueden llegar hasta cuarenta años de prisión. En realidad, la mejor prevención se obtiene afrontando seria y profundamente los diversos factores que favorecen la comisión de delitos, así como haciendo más probable su castigo, pero no con castigos más severos que no aportan solución alguna.

5. Por otro lado, el Gobierno ha anunciado otras modificaciones legales que previsiblemente comportarán un nuevo endurecimiento innecesario y contraproducente en la aplicación de las penas, con la probable consecuencia de un nuevo aumento de la población reclusa en nuestro país, que cuenta ya con una ratio de encarcelamiento superior a la media de Europa occidental, a pesar de que las tasas de delincuencia sean inferiores. Ello puede provocar más masificación penitenciaria y más dificultades para la reinserción social de los penados. Existen numerosos estudios científicos que muestran que la evolución de los penados con penas excesivamente largas es, a partir de un cierto momento, prácticamente nula y a menudo deriva hacia una degradación irreversible. Además, las continuas modificaciones del Código Penal que se producen desde hace quince años alteran gravemente su coherencia sistemática y dificultan su interpretación y su justa aplicación.

6. Finalmente, deseamos subrayar que, de acuerdo con lo que afirma el pensamiento social de la Iglesia, las penas “deben orientarse a la reinserción de las personas condenadas y a promover una justicia reconciliadora capaz de restaurar las relaciones de convivencia armoniosa rotas por el acto criminal” y nunca deben “privar definitivamente al condenado de la posibilidad de redimirse” (Compendio Doctrina Social de la Iglesia, n. 403 y 405).

Comisión General de Justicia y Paz

27 de septiembre de 2012

Organizaciones religiosas contra la Reforma Sanitaria

Varias organizaciones religiosas, algunas miembro del Foro de Laicos como Justicia y Paz, CVX – E, la HOAC… han reaccionado contra la reforma sanitaria. Recogemos esta noticia publicada en “El País”, en la que se entrevistó a Isabel Cuenca, secretaria general de Justicia y Paz.

 

 

 

 

 

 

 

 

La reforma sanitaria que restringe la asistencia gratuita a extranjeros en situación irregular, viola los principios fundamentales de la doctrina social de la Iglesia: la dignidad del ser humano, la solidaridad y el bien común. Por eso, una treintena de organizaciones religiosas se están movilizando contra la nueva norma que expulsa del sistema normalizado a 150.000 personas. Cáritas, Pueblos Unidos, Justicia y Paz, Ekumene, Comunidades de Vida Cristiana, Hermandad Obrera de Acción Católica… Entidades que, a través de manifiestos o actos —conjuntos e individuales—, han criticado duramente la reforma del Gobierno, que consideran “inmoral e injusta”. Algunos la definen incluso como “un apartheid sanitario”. Sus palabras y las declaraciones de algunos obispos, como los de Cataluña o Valencia, que se han mostrado “preocupados” por la situación, destacan frente al silencio de la Conferencia Episcopal Española.

“Es una medida discriminatoria que elimina derechos básicos a uno de los colectivos más vulnerables, las personas en situación irregular”, critica Brígida Moreta. Esta misionera carmelita ha iniciado una petición en la red de activismo ciudadano Actuable, con la que reclama al Gobierno la retirada de la medida. La propuesta ha reunido en varias semanas 20.000 firmas de apoyo. Aunque por ahora sin ningún resultado. Moreta, enfermera y comadrona que pasó 30 años en Malawi y que ha vivido en Kenia, Nigeria, Mozambique o Tanzania, considera que la exclusión de este colectivo —que solo podrá recurrir de manera gratuita a urgencias, pediatría y a la atención del embarazo y parto— crea un “apartheid sanitario”.

Lo mismo opina Daniel Izuzquiza, director de Pueblos Unidos, una entidad de la Compañía de Jesús de la que también forma parte Moreta y que tiene varios programas de apoyo en Madrid a estos colectivos. “La reforma toca el derecho a la salud por criterios puramente administrativos. Prima argumentos económicos frente a la dignidad de las personas”, afirma el jesuita. Justificación económica, además, dudosa, porque los expertos y economistas de la salud ya han puesto en tela de juicio que la medida vaya a generar el ahorro de al menos 500 millones de euros que anunció el ministerio que dirige Ana Mato.

Tampoco satisface a las entidades católicas la solución que propone Sanidad —lo hizo, de hecho, tras el gran revuelo formado por el decreto— para los excluidos: que las comunidades firmen convenios con organizaciones no gubernamentales para derivar a sus centros a los inmigrantes sin papeles. “Las organizaciones no tienen los mismos medios que la sanidad pública. Prestan una atención complementaria, pero no puede sustituirla en muchas cosas”, expone Isabel Cuenca, secretaria general de Justicia y Paz, entidad católica constituida en 1968 por la Conferencia Episcopal fruto del Concilio Vaticano II y que tiene, como explica Cuenca, la misión de mantener “la mirada atenta, el corazón sensible y la mano pronta para la caridad”. “Intentamos ver dónde se está atentando contra los derechos humanos y las situaciones de injusticia. Y este es uno de esos casos”, dice.

La situación es difícil también para los médicos, afirman las organizaciones religiosas, que han mostrado su apoyo a los profesionales que decidan objetar a la medida y continuar atendiendo a extranjeros sin papeles. “Obligándoles a que dejen de atender a una parte de la población se les está violentando en su ética y su profesión. Hay que unir fuerzas para apoyarles. Defendemos la objeción en muchos casos. Y este es uno”, dice la secretaria general de Justicia y Paz. Comunidades como Andalucía, País Vasco o Cataluña —que ha recurrido, por otros motivos, el decreto— ya han dicho que seguirán atendiendo a personas en situación irregular.

A estas reacciones se une una más. Las organizaciones —todas, católicas y laicas— que ya tienen programas de asistencia a personas en situación irregular alertan de que disponen cada vez de menos recursos a causa de los recortes. Una realidad golpea a los más débiles. “Si los recursos públicos resultan escasos, estas decisiones nunca pueden ser en perjuicio de los más pobres”, advierten desde la Mesa de Inmigración Diocesana de Sevilla (dependiente del obispado) que también se ha movilizado contra la nueva ley. “Absolutizar la lógica economicista sacrificando los valores humanitarios nos llama a recordar que una política no iluminada por la ética termina siendo injusta e ineficiente”, añaden.

Además, la medida es peligrosa, dicen. Cáritas, la organización solidaria de la Iglesia, presente en 6.000 parroquias y 68 diócesis, esbozaba hace unos días esos riesgos en un comunicado, en el que alertaba de que la reforma sanitaria puede aumentar la “estigmatización social” de los inmigrantes. “Alimenta un discurso reduccionista y lleno de riesgos, según el cual las personas migrantes que conviven y forman parte de nuestras comunidades son los responsables del deterioro socioeconómico actual”, aseguran.

Entre los obispos también ha habido críticas, aunque más veladas, a la nueva norma. Quien sí se ha pronunciado en contra es la Diócesis de Alicante. Su secretariado de Migración la ha considerado “inmoral” e “injusta”. Algunos activistas de estas organizaciones sostienen que con esta medida el PP traiciona sus raíces democristianas. “La reforma niega un principio básico de humanidad en el que ha insistido la doctrina social de la Iglesia”, afirma la asociación Juventud Obrera, que junto a la Hermandad Obrera de Acción Católica, se ha movilizado contra el texto. Y cita una pastoral y un documento de acción aprobado en 2007 por la Conferencia Episcopal: “Para la Iglesia, el emigrante, independientemente de la situación legal, económica, laboral, en que se halle, es una persona con la misma dignidad y derechos fundamentales que los demás, es un hijo de Dios (…) El inmigrante no es una fuerza de trabajo, sino una persona”

El jesuita Izuzquiza añade que la reforma es contraria a lo que marca el Evangelio. “En el capítulo 25 de [san] Mateo, Jesucristo se identifica con cada una de las personas en situación de necesidad, independientemente de su origen, raza o estatus jurídico. Dios mismo echa en cara en el juicio final: ‘¿Cuándo te vimos enfermo y no te asistimos?’, preguntan. ‘Lo que hicisteis con uno de estos mis hermanos más pequeños [más frágiles y vulnerables] conmigo lo hicisteis’, responde Dios”.

Enlace noticia

Premio Alfonso de Borja 2012 a Justicia i Pau

El pasado día 4 de junio la Asociación de Antiguos Alumnos y Amigos de la Universitat de Lleida concedió el premio Alfonso de Borja 2012 a Justícia i Pau en «reconocimiento a su labor de sensibilización social». Con este premio la Asociación pretende reconocer a aquellas personas o Instituciones que con su trabajo han contribuido al desarrollo humano y social de su comunidad, desde el punto de vista económico, político, medioambiental, cultural u otros y que se han regido en sus actuaciones por los valores de la igualdad, justicia, rigor y excelencia que inspiran la Universidad.

En el acto de otorgamiento del premio, el Excmo. Sr. Obispo de la diócesis de Lleida agradeció a la Asociación y al Magfco. Rector de la Universitat de Lleida, presente en el acto, el reconocimiento a Justícia i Pau, entidad creada a raíz del Concilio Vaticano II y que ha mantenido una firme tarea de fidelización al espíritu del mismo.

Después de recibir el premio –un cuadro del pintor leridano Ureña – Rafael Allepuz, presidente de la comisión diocesana de Justícia i Pau de Lleida, presentó la entidad, explicando sus orígenes, misión, actividades y organización en red (nombró a cada una de las comisiones que forman parte de la coordinadora catalanobalear y de la coordinadora estatal de Justicia y Paz)

Finalmente, Arcadi Oliveres, presidente de la comisión de Barcelona, en su parlamento hizo una breve valoración de la situación actual.

Enlace 1   Enlace 2    Enlace 3

Conclusiones de la Jornada anual de Justicia y Paz de España

Como hemos venido anunciando, los días 20 y 21 de abril se celebró en Tarragona la Jornada Anual de Justicia y Paz de España. Con el título: “La aportación social y ética de las religiones en tiempos de crisis”, se hicieron aportaciones desde la teoría, el análisis de la realidad actual y la práctica que enfrentamos en ella.

Pueden encontrar imágenes del encuentro, un resumen del mismo y varios vídeos de los ponentes a través de este enlace:  https://www.juspax-es.org/index.php/actividades/ver/id_actividad/161