XIX Jornadas Generales de Pastoral Obrera

Desde las experiencias compartidas y la reflexión y oración común, los objetivos de las XIX Jornadas Generales de Pastoral Obrera son profundizar en:

• la precariedad como condición laboral y existencial
• la acogida y el acompañamiento a las víctimas de la precariedad
• la vivencia de la espiritualidad cristiana en la precariedad
• la tarea evangelizadora en un mundo obrero precarizado

 

Encuesta para el Sínodo extraordinario sobre la familia

El Papa Francisco ha realizado una encuesta mundial a todos los católicos del mundo que, según el Annuarium Statisticum, son en total 1214 millones. Esta encuesta es debido a que la celebración en octubre de 2014 de un sínodo extraordinario sobre la familia. Esas preguntas engloban muchos temas que preocupan al Papa. A continuación puede ver las preguntas que el Papa ha enviado, pero si quiere realizar usted la encuesta puede hacerla aquí.

1.- Sobre la difusión de la Sagrada Escritura y del Magisterio de la Iglesia sobre la familia
a) ¿Cuál es el conocimiento real de las enseñanzas de la Biblia, de la (encíclica) ‘Gaudium et Spes’, de la ‘Familiaris consortio’ y de otros documentos del magisterio postconciliar (Vaticano II) sobre el valor de la familia según la Iglesia Católica? ¿Cuál es la formación de nuestros fieles para la vida familiar según las enseñanzas de la Iglesia?
b) Allí donde la enseñanza de la Iglesia es conocida, ¿es aceptada integralmente? ¿Hay dificultades en ponerla en práctica? ¿Cuáles?
c) ¿Cómo es difundida la enseñanza de la Iglesia en el contexto de los programas pastorales en el ámbito nacional? ¿diocesano, parroquial? ¿Qué catequesis se hace sobre la familia?
d) ¿En qué medida –concretamente sobre qué aspectos—tal enseñanza es realmente conocida, aceptada, rechazada y/o criticada en ambientes extra eclesiales? ¿Cuáles son los factores culturales que obstaculizan la plena recepción de la enseñanza de la Iglesia sobre la familia?

2.- Sobre el matrimonio de acuerdo con la ley natural:
a) ¿Qué lugar ocupa el concepto de ley natural en la cultura civil, tanto en ámbito institucional, educativo y académico, como en ámbito popular? ¿Qué ópticas antropológicas se sobreentienden en este debate sobre el fundamento natural de la familia?
b) El concepto de ley natural con relación a la unión entre el hombre y la mujer ¿es comunmente aceptado como tal de parte de los bautizados en general?
c) ¿Cómo es contestada en la práctica y en la teoría la ley natural sobre la unión entre hombre y mujer en vistas de la formación de una familia? ¿Cómo es propuesta y profundizada en los organismos civiles y eclesiales?
d) En el caso de que pidan el matrimonio los bautizados no practicantes o quienes se declaran no creyentes, ¿cómo afrontar los desafíos pastorales que derivan de ello?

3.- La pastoral de la familia en el contexto de la evangelización:
a) ¿Cuáles son las experiencias surgidas en los últimos decenios en orden a la preparación al matrimonio? ¿De qué manera se ha intentado estimular el deber de evangelización de los esposos y de la familia? ¿De qué manera promocionar la conciencia de la familia como “Iglesia doméstica”?
b) ¿Se ha conseguido proponer estilos de plegaria en familia que consigan resistir a la complejidad de la vida y cultura actuales?
c) En la crisis actual entre generaciones, ¿cómo las familias cristianas han sabido realizar la propia vocación de transmisión de la fe?
d) ¿En qué manera las Iglesias locales y los movimientos de espiritualidad familiar han sabido crear caminos ejemplares?
e) ¿Cuál es la aportación específica que parejas y familias han conseguido dar respecto a la difusión de una visión integral de la pareja y de la familia cristiana que sea actualmente creíble?
f) ¿Qué atención pastoral ha manifestado la Iglesia para apoyar el camino de las parejas en la formación y de las parejas en crisis?

4.- Sobre la pastoral para afrontar algunas situaciones matrimoniales difíciles:
a) La convivencia “ad experimentum” (experimental), ¿es una realidad pastoral de relieve en la Iglesia particular (local)? ¿En qué porcentaje se podría estimar numéricamente?
b) ¿Existen uniones libres de hecho, sin reconocimiento ni religioso ni civil? ¿Hay datos estadísticos fiables?
c) Los separados y divorciados que se vuelven a casar ¿son una realidad pastoral relevante en la Iglesia particular? ¿En qué porcentaje se podría estimar numéricamente? ¿Cómo se afronta esta realidad a través de programas pastoral adecuados?
d) En todos estos casos, ¿cómo viven los bautizados sus irregularidades? ¿Son conscientes de ellas? ¿Manifiestan simplemente indiferencia? ¿Se sienten marginados y viven con sufrimiento la imposibilidad de recibir los sacramentos?
e) ¿Cuáles son las peticiones que las personas divorciadas y vueltas a casar dirigen a la Iglesia, respecto a los sacramentos de la Eucaristía y de la Reconciliación? Entre las personas que se encuentran en esta situación, ¿Cuántas piden estos sacramentos?
f) ¿La simplificación de la praxis canónica, respecto al reconocimiento de la declaración de anulación del vínculo matrimonial podría ofrecer una real contribución positiva para la solución de los problemas de las personas implicadas? En caso afirmativo, ¿de qué manera?
g) ¿Existe una pastoral para acercarse a estos casos? ¿Cómo se desarrolla tal actividad pastoral? ¿Existen programas sobre ello en ámbito nacional y diocesano? ¿Cómo se anuncia a separados y divorciados vueltos a casar la misericordia de Dios y cómo se concreta el sostén de la Iglesia en su camino de fe?

5.- Sobre las uniones de personas del mismo sexo:
a) ¿Existe en vuestro país una ley civil que reconozca las uniones de personas del mismo sexo equiparadas de alguna manera al matrimonio?
b) ¿Cuál es la actitud de las Iglesias particulares y locales tanto frente al Estado Civil promotor de uniones civiles entre personas del mismo sexo, como frente a las personas implicadas e este tipo de unión?
c) ¿Qué atención pastoral es posible tener hacia las personas que han elegido de vivir según este tipo de uniones?
d) En el caso de uniones de personas del mismo sexo que haya adoptado niños, ¿cómo comportarse en vistas de la transmisión de la fe?

6.- Sobre la educación de los hijos en el sino de situaciones matrimoniales irregulares:
a) ¿Cuál es en estos casos la proporción estimada de niños y adolescentes con relación a los niños nacidos y crecidos en familias regularmente constituidas?
b) ¿Con qué actitud los padres se dirigen a la Iglesia? ¿Qué solicitan? ¿Solo los sacramentos o también la catequesis y la enseñanza en general de la religión?
c) ¿De qué manera las Iglesias particulares se acercan a la necesidad de los padres de estos niños para ofrecer una educación cristianas a los propios hijos?
d) ¿Cómo se desarrolla la práctica sacramental en estos casos: la preparación, administración del sacramento y el acompañamiento?

7.- Sobre la apertura de los esposos a la vida:
a) ¿Cuál es el conocimiento real que los cristianos tienen de la doctrina de la (encíclica) “Humanae Vitae” sobre la paternidad responsable? ¿Qué conciencia hay de la evaluación moral de los distintos métodos de regulación de los nacimientos? ¿Qué profundizaciones se podrían sugerir sobre ello desde el punto de vista pastoral?
b) ¿La doctrina moral es aceptada? ¿Cuáles son los aspectos más problemáticos que hacen difícil su aceptación en la mayoría de las parejas?
c) ¿Qué métodos naturales se promueven de parte de la Iglesias particulares para ayudar a los conyugues a poner en práctica la doctrina de la “Humanae vitae”?
d) ¿Qué experiencia hay sobre esta cuestión en la praxis del sacramento de la penitencia y en la participación en la eucaristía?
e) ¿Qué contrastes se evidencian entre la doctrina de la Iglesia y la educación civil a este respecto?
f) ¿Cómo promover una mentalidad mayormente abierta a la natalidad? ¿Cómo favorecer el aumento de los nacimientos?

8.- Sobre la relación entre la familia y la persona:
Jesucristo revela el misterio y la vocación del hombre: ¿la familia es un lugar privilegiado para que esto suceda?
¿Cuáles situaciones críticas de la familia en el mundo actual pueden constituir un obstáculo para el encuentro de la persona con Cristo?
¿En qué medida la crisis de fe que pueden sufrir las personas inciden en su vida familiar?

9.- Otros desafíos y propuestas:
¿Existen otros desafíos y propuestas respecto a los temas tratados en este cuestionario, que sean consideradas como urgentes o útiles de parte de los destinatarios?.

Manos Unidas: ¡Tú puedes mover el mundo!

 

El próximo mes de noviembre, y especialmente el día 21, Manos Unidas celebrará por primera vez las “24 horas que mueven el mundo”, una nueva acción global de sensibilización solidaria que se desarrollará en al menos 24 ciudades españolas y a través de más de 24 actividades diferentes, una de ellas durante 24 horas ininterrumpidas. Todo ello con proyección internacional y, a través del eslogan “Tú puedes mover el mundo”, buscando también la implicación y responsabilidad individual en el cambio social y solidario necesario para lograr la justicia, la paz y el desarrollo en el mundo.

  • Más de 24 actividades: las “24 horas que mueven el mundo” englobarán numerosas actividades, para todos los públicos y distribuidas en cuatro modalidades generales: Redes, Conocimiento, Arte y Solidaridad, como por ejemplo: cuenta cuentos, conferencias, debates, exposiciones, mesas redondas, conciertos, concursos…etc.
  • 24 ciudades españolas + Internet: las “24 horas que mueven el mundo” se realizan con el apoyo de las 70 delegaciones de Manos Unidas en toda España, algunas de sus actividades no tendrán delimitación geográfica por ser a través de Intern
    et (modalidad Redes) y sus principales eventos tendrán lugar en 24 ciudades: Albacete, Almería, Barcelona, Bembibre, Castellón, Ceuta, Ciudad Real, Granada, Guadix, Huesca, La Bañeza, Las Palmas, León, Logroño, Madrid, Málaga, Mallorca, Orense, Palencia, Plasencia, Pontevedra, Salamanca, Santiago de Compostela y Sevilla.
  • 24 horas de “luz” en todo el mundo: gracias a la presencia de Manos Unidas en todo el planeta (550 proyectos de cooperación en 56 países[2]) las “24 horas que mueven el mundo” tienen carácter internacional. A través de la actividad “Enciende la llama” se implicarán de manera individual personalidades del mundo del desarrollo, miembros de las ONG con las que trabaja Manos Unidas y todas las personas que lo deseen a través de Internet, pero también será una actividad colectiva, participando en ella colegios, parroquias y todos los grupos que quieran realizarla en plazas, parques, lugares emblemáticos, estadios de fútbol, teatros… Así, desde el 20 de noviembre, una cadena de luz recorrerá las franjas horarias del globo, regresando de nuevo a Madrid tras crear un rastro de luz que recuerde de manera simbólica, la necesidad de trabajar unidos por el desarrollo integral de todas las personas.

Más información en: https://www.manosunidas.org/noticia/el-proximo-mes-noviembre-tu-puedes-mover-el-mundo-con-24hmanosunidas

Jornadas Nacionales en la Conferencia Episcopal Española

Para los próximos días, la Conferencia Episcopal Española ha programado dos eventos que pueden resultar de su interés:

Jornada de oración y ayuno mundial para la Paz.

El papa Francisco se ha pronunciado este domingo sobre el conflicto en Siria y ha convocado para el próximo 7 de septiembre una jornada de oración y ayuno mundial para la paz en Siria, en Oriente Próximo y en todo el mundo.
papa paz

 

El Papa ha dedicado todo el rezo del Ángelus en la plaza de San Pedro del Vaticano a lanzar un fuerte llamamiento para que “no haya más guerras” y ha expresado su preocupación por el “dramático desarrollo que se presenta en Siria”. Así, ha instado a todas las partes implicadas en el conflicto sirio a buscar la paz en el país por medio del diálogo y la negociación. “La humanidad necesita ver gestos de paz y oír palabras de paz”, ha subrayado.

“¡Qué no haya mas guerras! La paz es un don demasiado precioso que tiene que ser promovido y tutelado!, ha destacado el Pontífice antes de advertir: “La guerra solo produce más guerras y la violencia más violencia”.”En estos días mi corazón está profundamente herido por lo que está ocurriendo en Siria y angustiado por el dramático desarrollo que se prepara”, ha añadido.

En su mensaje, Francisco también ha condenado con dureza el uso de las armas químicas. “Todavía tengo en el corazón y en la mente las terribles imágenes de los pasados días. Dicho esto, ha apostado por el diálogo: “No es la cultura del enfrentamiento y del conflicto lo que construye la convivencia entre los pueblos, sino la del encuentro y la del diálogo. Este es el único camino para la paz”.

Carta Encíclica Lumen Fidei del Papa Francisco.

Firmada el 29 de junio y completando el ciclo de las virtudes teologales (iniciado con Benedicto XVI con Spe Salvi y Caritas en Veritate), se ha publicado “Lumen Fidei“, la primera encíclica del papa Francisco, acerca de la fe. “Fe, esperanza y caridad, en admirable urdimbre, constituyen el dinamismo de la existencia cristiana hacia la comunión plena con Dios” dice en la primera parte del texto.

Comienza presentando un breve recorrido por la concepción de la luz de la fe, en el que destaca:  “El hombre ha renunciado a la búsqueda de una luz grande, de una verdad grande, y se ha contentado con pequeñas luces que alumbran el instante fugaz, pero que son incapaces de abrir el camino. Cuando falta la luz, todo se vuelve confuso, es imposible distinguir el bien del mal, la senda que lleva a la meta de aquella otra que nos hace dar vueltas y vueltas, sin una dirección fija.Por tanto, es urgente recuperar el carácter luminoso propio de la fe, pues cuando su llama se apaga, todas las otras luces acaban languideciendo”

Continua aclarando que la fe, esta luz,  “nace del encuentro con el Dios vivo, que nos llama y nos revela su amor, un amor que nos precede y en el que nos podemos apoyar para estar seguros y construir la vida“.

El texto se escribe en el contexto de los 50 años del Concilio Vaticano II y en pleno Año de la Fe, circunstancias ambas que nos invitan a poner de nuevo en el centro de nuestra vida eclesial y personal el primado de Dios en Cristo. Porque, como dice el Santo Padre: “ la Iglesia nunca presupone la fe como algo descontado, sino que sabe que este don de Dios tiene que ser alimentado y robustecido para que siga guiando su camino“.

El primer capitulo, el de mayo recorrido histórico, se dedica a presentar la fe de Jesucristo porque como señala: “La fe nos abre el camino y acompaña nuestros pasos a lo largo de la historia. Por eso, si queremos entender lo que es la fe, tenemos que narrar su recorrido, el camino de los hombres creyentes“. Destaca al final de este primer capítulo las enseñanzas sobre la forma eclesial de la fe: que la fe ha de vivirse y confesarse dentro del cuerpo de Cristo, como comunión real de los creyentes. “La fe no es algo privado, una concepción individualista, una opinión subjetiva, sino que nace de la escucha y está destinada a pronunciarse y a convertirse en anuncio.”

En el segundo capítulo trata las relaciones entre la fe y otras realidades como la verdad, el amor y la razón. También destaca la iniciación a la fe de los no creyentes: “La fe concierne también a la vida de los hombres que, aunque no crean, desean creer y no dejan de buscar. En la medida en que se abren al amor con corazón sincero y se ponen en marcha con aquella luz que consiguen alcanzar, viven ya, sin saberlo, en la senda hacia la fe

La evangelización es el tema del tercer capítulo porque ” quien se ha abierto al amor de Dios, ha escuchado su voz y ha recibido su luz, no puede retener este don para sí. La fe, puesto que es escucha y visión, se transmite también como palabra y luz.

La fe no sólo se presenta como un camino, sino también como una edificación, como la preparación de un lugar en el que el hombre pueda convivir con los demás” La encíclica se cierra con un capítulo referido al bien común y con la fe como elemento imprescindible para la construcción de la ciudad fiable. Acaba con una oración a María.

Pueden encontrar el texto completo, también para su descarga en pdf a través de esta dirección: https://www.vatican.va/holy_father/francesco/encyclicals/documents/papa-francesco_20130629_enciclica-lumen-fidei_sp.html

“Este soy yo… Humano desde el principio” – Jornada por la vida 2013.

La Subcomisión para la Familia y Defensa de la Vida ha fijado el próximo 8 de abril de 2013 la Jornada por la Vida. En ella, la Iglesia en España quiere celebrar el don precioso de la vida humana, especialmente en las primeras etapas tras su concepción. En esta ocasión, de manera especial, ante la falta de protección a la que hoy en día está sometida.

Pueden encontrar todos los materiales y más información a través de este enlace: https://www.conferenciaepiscopal.es/index.php/jornada-vida.html

 

 

Se va, ligero de equipaje

Al conocer la noticia de la renuncia de Benedicto XVI, la Comisión Permanente del Foro de Laicos le envió una carta, en la que entre otras cosas, decíamos: “Le agradecemos de corazón la esperanza sembrada con su palabra, con sus gestos, con su cercanía. Y le hacemos llegar nuestro más profundo respeto por la decisión que ha tomado, acogiendo en ella un mensaje de libertad y de verdad propias del Espíritu de Jesucristo”. Estos mismos sentimientos los hago míos y con ellos me uno no sólo a los católicos, sino a tantas otras personas que se han expresado en parecidos términos.

El último gesto de Benedicto XVI es el gesto de un hombre para quien la búsqueda de la verdad ha sido una de las peregrinaciones más significativas de su vida. Nos tenía acostumbrados a hablar de la verdad de la fe, de la caridad en la verdad, de verdad y tolerancia,… Con este gesto nos ha hablado de la búsqueda de la verdad sobre sí mismo. Nos ha mostrado cómo cuando la fragilidad se le ha hecho sentir, ha sabido reconocer que había llegado el tiempo para adentrarse, “ligero de equipaje”, en el silencio de la relación con quien es la Fuente de la Vida. Y lo ha hecho con la certeza de saber que Quien le encomendó el timón de la Iglesia, sigue conduciendo el barco.

Los hombres y las mujeres de Dios, decía san Pedro Poveda son inconfundibles. Estamos ante un hombre habitado por el Espíritu de Dios, que nos ha mostrado su confianza en la palabra de Jesús: “La verdad os hará libres”, al haber acometido capítulos de ocultación en la vida de la Iglesia, que requerían purificación y petición de perdón. Supo pedirlo y también supo ofrecerlo cuando él mismo fue agredido en su intimidad. Son expresiones de la fuerza de la fe en Jesucristo de alguien que la ha predicado con vigor, sin escamotear entrega, dándose a sí mismo en su palabra, en sus viajes, en su relación directa con personas de toda condición.

Benedicto XVI tiene ese don de transparentar en su palabra, en sus gestos, en su mirada profunda, limpia, serena, que el Espíritu de Dios ha encontrado en él una morada a su gusto. Lo ví de cerca durante la JMJ, en Cuatro Vientos, allí me impresionó cómo el recogimiento profundo de su persona en la adoración ante la Eucaristía, atrajo al silencio prolongado y denso, al millón de personas que orábamos con él. Una noche inolvidable.

De su magisterio nos quedan joyas de gran valor. Quizás lo que más me ha impresionado es el modo como ha sabido transmitir la significatividad de la fe cristiana para la vida humana, para cada persona en particular, y también para contribuir a la transformación de la sociedad en la dirección del Reino. Este último aspecto, ha estado presente tanto en sus reflexiones teológicas como en sus intervenciones públicas ante los representantes de las instituciones políticas de los países que ha visitado. Allí ha hablado con la autoridad de un maestro, y yo diría que con la autoridad que los contemporáneos de Jesús reconocieron en Él.

La significatividad de la fe cristiana para la vida humana ha sido una constante y un auténtico empeño. La puerta de la fe está abierta para todos, para cada uno. Cuando leí la encíclica Deus Charitas est, me impactó precisamente que su primera carta la escribiera presentando a Dios del modo más fácilmente comprensible para el ser humano, a través de la experiencia del amor. Leí su carta sobre la Esperanza en un momento en que me rodeaba de manera especial el sufrimiento de las personas más cercanas, y encontré que entre los lugares que señalaba para aprender a esperar estaba el sufrimiento; meditar sus palabras fue y sigue siéndolo, un alimento que vigoriza mi esperanza. El título de la tercera encíclica, caridad en la verdad, me sorprendió inicialmente, pero pronto comprendí que era la expresión más honda y acabada a la que conduce su gran trayectoria de apostar por la inseparable compañía entre la fe y la razón, que aquí se traducía en caridad y verdad, y que llevaba en su seno un modo de mostrar como tejer en el ámbito personal, pero sobre todo en el ámbito público, el también binomio humano de sentimiento y razón. Son páginas clásicas a las que volver.

Con los jóvenes supo generar una profunda empatía. Les animó a encontrar en la fe en Jesucristo la alegría y la fuerza para vivir, para comprometerse con los otros, para superar las dificultades y las aflicciones de la vida, para transformar la sociedad y construir un futuro en la dirección de la justicia y la paz. Traigo al recuerdo las palabras que dirigió a los jóvenes en Madrid, en el Líbano y en tantos otros lugares; siempre una invitación para encontrar en el encuentro con el Señor nuevo vigor y nueva energía.

Valoro especialmente el gran acierto de Benedicto XVI al proclamar el año de la fe en el contexto de la nueva evangelización. Pronto veremos los nuevos horizontes que ésta dinamica está abriendo en la Iglesia. No puedo dejar de subrayar su modo de abordar la secularización y de proponer nuevos escenarios para la transmisión de la fe. Subrayo solamente dos aspectos: el atrio de los gentiles es ya una realidad .La razonabilidad de la fe que proporciona un espacio de diálogo en las búsquedas comunes de nuestra cultura contemporánea. Los hombres y mujeres de fe tenemos algo muy valioso que ofrecer en del debate público, un horizonte de humanidad que va más allá de lo que la razón, por sí misma, puede lograr.

En el caso de la ciencia, Benedicto XVI deja un mensaje no sólo de que la ciencia y la fe pueden caminar juntas, y cada una aportar algo valioso a la otra, sino que ambas han de situarse al servicio del desarrollo humano y del desarrollo de los pueblos. Y en esta tarea, la ciencia puede recibir de la fe orientación, estímulo y motivación.

Mis últimas palabras son de gratitud por el impulso que Benedicto XVI ha concedido a la participación de los laicos en la misión de la Iglesia. No me resisto a transcribir unas palabras del mensaje enviado a la IV asamblea del Foro Internacional de la Acción Católica, fechado en Castel Gandolfo el 10 de agosto del 2012: “La corresponsabilidad exige un cambio de mentalidad especialmente respecto al papel de los laicos en la Iglesia, que no se han de considerar como «colaboradores» del clero, sino como personas realmente «corresponsables» del ser y del actuar de la Iglesia”. En este texto el Papa habla de corresponsabilidad de los laicos, y en estas palabras podemos encontrar un avance en relación a lo expresado en la Christi Fideles Laici, que a su vez dio un paso adelante respecto del Concilio. Éste había hablado de: “Ayuda del clero al apostolado seglar” (Apostolicam Actuositatem nº25) y veinte años después, esta encíclica hablaba de “un nuevo estilo de colaboración entre sacerdotes y laicos” (nº 2.9).Ahora Benedicto XVI ha dado un paso más que constituye un legado para agradecer y un desafío en el que comprometernos.

 

 

Se va, ligero de equipaje _Camino Cañón, sobre BXVI_