El tumor cerebral que le fue extirpado el pasado 3 de enero al P. Álvaro Corcuera, director general de los legionarios del Cristo y el Regnum Christi, ha resultado ser un glioma de 4º grado, por lo que será sometido durante seis semanas a radiación y quimioterapia. Ha salido hoy del hospital y comenzará el tratamiento dentro de unas dos semanas.
El P. Álvaro Corcuera, LC, informó el pasado 9 de octubre a los legionarios de Cristo y miembros del Regnum Christi de que había solicitado un periodo de descanso al Delegado Pontificio, Cardenal Velasio De Paolis, porque no contaba con la salud necesaria para enfrentar de manera responsable las exigencias del gobierno general.
Se pensaba entonces que los problemas de salud eran consecuencia de estos años especialmente marcados por situaciones difíciles, tensiones y sufrimientos, pero el 30 de diciembre le fue descubierto un tumor en el cerebro al tener que ser ingresado en el Hospital St. Francis (Hartford, Connecticut), debido a unos fuertes dolores de cabeza. Después de algunos análisis, los médicos decidieron que era necesario operar para extirparlo.
Fue trasladado el 2 de enero a la Clínica Mayo, (Jacksonville, Florida) para ser sometido el 3 de enero a una intervención quirúrgica que duró entre cuatro y cinco horas. Se logró extirpar todo el tumor, que estaba bien definido y sin metástasis, pero se confirmó que era maligno. El 8 de enero, tras los análisis precisos, se diagnosticó que el tumor era un glioma de 4º grado, por lo que el P. Álvaro tendrá que someterse a radiación y quimioterapia. El día de hoy ha salido del hospital. Tras un breve período de recuperación, se iniciará el tratamiento que se prevé durará unas seis semanas.
Durante los primeros días de postoperatorio, se comprobó que el tumor no había dañado sus facultades de modo permanente: reconocía a todas las personas, volvió a caminar sin necesidad de apoyo y a conversar. Se detectaron algunos daños en la vista que, según los médicos, se irían corrigiendo paulatinamente. El P. Álvaro ha estado acompañado de forma permanente por su hermano y sus hermanas, que se desplazaron desde México hasta Jacksonville, y por dos sacerdotes legionarios de Cristo (Jeremy Lambert y Kevin Meehan).
El P. Álvaro Corcuera ha recibido las noticias con entereza y serenidad, uniéndose a todos los enfermos, especialmente a los legionarios y miembros del Regnum Christi que viven una situación delicada de salud, ofreciendo con ellos sus dolores por la Iglesia, el Papa, el Regnum Christi y la Legión. Agradece lasmuestras de apoyo y cercanía y las oraciones.