HOAC: ¡Ahora más que nunca! | #7décadasHOAC

 
¡Ahora más que nunca! | #7décadasHOAC
En 1946 los obispos españoles acordaron la creación de un movimiento especializado para los obreros adultos dentro de la Acción Católica. Desde el Consejo Nacional de Hombres de Acción Católica se propuso a Guillermo Rovirosa, que venía trabajando en la Acción Católica de Madrid desde hacía unos años, la tarea de organizar y promover la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC). Guillermo aceptó y del 26 de octubre al 3 de noviembre de 1946 se celebró la I Semana Nacional de la HOAC, que fue el comienzo de su andadura como movimiento apostólico obrero. Se cumplen, pues, ahora, los 70 años de vida de nuestro movimiento.
Siete décadas, 70 años de vida eclesial encarnada en el mundo obrero y del trabajo. Porque si algo ha querido ser la HOAC es vida cristiana eclesial en medio de la realidad sufriente del mundo obrero y del trabajo. Con el empeño de reconocer y vivir a Cristo Jesús, «el Divino Obrero de Nazaret», acompañando la vida cotidiana de nuestras hermanas y hermanos trabajadores, para colaborar desde su Evangelio a que sea respetada la sagrada dignidad de cada persona. Como escribió Rovirosa, «la lucha de la HOAC se encamina, en primer lugar, a que todo obrero recobre la conciencia de su dignidad de hombre y de obrero a la luz de Cristo».
De esa experiencia de 70 años, con todos sus aciertos y sus errores, queremos ante todo dar gracias a Dios por el testimonio entregado de tantos hombres y mujeres, trabajadores y trabajadoras, seguidores de Jesucristo; por su permanente empeño de fidelidad a Él y a su Iglesia al servicio del mundo obrero y del trabajo; por la profunda experiencia comunitaria de fe cristiana convertida en amor y lucha por la justicia. Gratitud por la afirmación constante de la dignidad de las personas trabajadoras y del trabajo a la luz del Evangelio, causa esencial de la Iglesia en la que tanto insiste hoy el papa Francisco, y de la que dijo san Juan Pablo II que es para la Iglesia «su misión, su servicio, verificación de su fidelidad a Cristo, para poder ser verdaderamente la Iglesia de los pobres», que son frecuentemente resultado de la violación de la dignidad del trabajo humano (LE 8). Empeño sustentado en una convicción: el Evangelio de Jesús responde a las necesidades más profundas del ser humano, en lo personal y en lo social, pues estamos vocacionados al amor fraterno (EG 265).
Nuestra gratitud quiere mirar al presente y al futuro y transformarse en respuesta decidida y reafirmada de continuidad con ese servicio y esa vida encarnada. «Ahora más que nunca» es el lema que Rovirosa adoptó en unos momentos difíciles y de profunda experiencia de la propia debilidad, poniendo toda su confianza en Dios. Hoy el mundo obrero y del trabajo sufre una situación difícil, con tantas personas y familias privadas de trabajo digno, despojadas de sus derechos más básicos y que no pueden vivir y ser con la debida dignidad. La idolatría del dinero devora personas y demuele la dignidad del trabajo. Hoy más que nunca es fundamental el empeño por afirmar la dignidad del trabajo y luchar por el trabajo digno. Ahora más que nunca el mundo obrero y del trabajo, y por extensión el conjunto de nuestra sociedad, necesitan de la pastoral obrera de toda la Iglesia, a cuyo servicio quiere seguir entregándose la HOAC desde su identidad de Acción Católica. ¡Qué el Señor, con su amor entrañable y misericordioso, nos siga sosteniendo en ese empeño!
Información extraída de: https://www.hoac.es/2016/10/14/ahora-mas-que-nunca-7decadashoac/

HOAC, JUSTICIA Y PAZ, JEC Y JOC: Organizaciones de la Iglesia convocan actos en 40 ciudades para reivindicar la necesidad de un trabajo decente

Con motivo de la celebración de la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, el próximo 7 de octubre, las organizaciones de Iglesia que impulsan la iniciativa #IglesiaporelTrabajoDecenteCáritas, CONFER, HOAC, Justicia y Paz, Juventud Estudiante Católica y Juventud Obrera Cristinaconvocan por segundo año consecutivo diversos actos públicos en las distintas diócesis del país.
Las plazas e iglesias de 40 ciudades españolas serán el escenario de las actividades programadas por estas entidades, para renovar su compromiso de seguir construyendo y exigiendo una sociedad que defiende el trabajo decente. El trabajo decente refleja las prioridades de la agenda social, económica y política de los países y del sistema internacional. Es, además, un elemento fundamental para alcanzar una globalización justa, reducir de la pobreza y obtener desarrollo equitativo, inclusivo y sostenible.
Hoy es esencial defender el trabajo decente, el derecho a trabajar de toda persona capaz de ello (tanto el trabajo que genera ingresos –empleo— como el que no). Para ello, es necesario amparar un trabajo realizado bajo condiciones dignas para la persona, que se ve seriamente dificultado por el actual modelo socioeconómico.
Para las entidades convocantes, la defensa del trabajo decente implica:
 Poner en el centro a la persona y romper la actual lógica de pensar y organizar el trabajo desde lo económico y los intereses de unos pocos.
 Plantear el sentido y el valor del trabajo más allá del empleo.
 Luchar por unas condiciones dignas de empleo.
 Articular el trabajo y el descanso de forma humanizadora.
 Luchar para que el acceso a derechos humanos como la sanidad, la vivienda o la educación no esté condicionado a tener un empleo.
Ante la celebración de este 7 de octubre, Jornada Mundial por el Trabajo Decente, las entidades de Iglesia, a través de una actuación en red, han organizado un amplio programa de iniciativas conjuntas a escala tanto estatal como diocesana y local para informar, sensibilizar e involucrar a toda la sociedad en la defensa y protección activa de este derecho.
Cáritas, CONFER, HOAC, Justicia y Paz, Juventud Estudiante Católica y Juventud Obrera Cristiana lanzan una invitación a toda la ciudadanía a unirse a esta Jornada y a sumarse a las diferentes acciones que se van a llevar a cabo en todo el país.
Información obtenida en: https://www.hoac.es/2016/10/04/organizaciones-de-la-iglesia-convocan-actos-en-mas-de-40-ciudades-para-reivindicar-la-necesidad-de-un-trabajo-decente/

HOAC: 70 aniversario.

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El próximo día 3 de noviembre, jueves, se cumplen 70 años del nacimiento de la HOAC. En esa misma fecha pero en 1946 concluyó la I Semana Nacional, que se celebró desde el 26 de octubre al 3 de noviembre en los locales de la Parroquia de la Virgen Milagrosa, de Madrid.
Nuestra intención es celebrar la efemérides como merece, aunque de manera sencilla. A las 19.00 horas de ese día celebraremos una Eucaristía de acción de gracias en la Basílica de la Milagrosa, y compartiremos después una copa de vino, con obispos, militantes, amigos, simpatizantes, miembros de otras organizaciones, etc.
Queremos que te sientas invitada, invitado desde ahora a acompañarnos. Para nosotros sería una enorme alegría contar contigo.
Un abrazo fraterno y ¡hasta mañana en el altar!
Jose Fernando Almazán
Presidente General
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HOAC: "Orar y vivir el trabajo y las situaciones de las y los trabajadores desde la misericordia"

SALAMANCA, 15.07.2106 • CURSOS DE VERANO 2016 #CVHOAC
Del 11 al 17 de julio, hemos celebrado en la Residencia de los Padres Paúles, de Salamanca,los Cursos de Verano de la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC). Un espacio de oración, diálogo, profundización y convivencia sobre «Orar y vivir el trabajo y las situaciones de las y los trabajadores desde la misericordia» con la participación de más de 250 personas.
A través de distintas ponencias y reflexiones, hemos dialogado sobre el sentido del trabajo y por qué necesitamos un trabajo decente, así como los retos que la orientación actual del trabajo nos presenta a la sociedad, a la Iglesia y a la HOAC. Hemos puesto en común experiencias de nuestro compromiso social, sindical y político que intentan ser expresión de la misericordia de Dios con nuestros compañeros y compañeras del trabajo.
Hemos tenido también espacios de oración, para sacerdotes, seminaristas, animadores de la fe y militantes, una ocasión para reflexionar y rezar los procesos de acompañamiento de las personas del mundo obrero con las que compartimos la vida.
En el marco de estos días, hemos tenido la oportunidad de compartir la Eucaristía con la Iglesia de Salamanca en la Catedral nueva, manifestándonos públicamente, con una concentración en la calle, que nuestra sociedad sólo podrá ser decente en la medida que sea capaz de procurar trabajo digno para todos los hombres y mujeres que la formamos.
Afirmamos que el trabajo ha ido pasando progresivamente de ser un bien para la vida a ser un instrumento para la producción. Muchos trabajadores y trabajadoras están sufriendo una gran precariedad. Y esta precarización del trabajo que estamos padeciendo supone también la degradación de la empresa y de la economía, por lo que estamos llamados a repensar el sentido y la función que realmente deben tener para que sirvan al bien común.
Creemos que, ante la situación de insolidaridad estructural que se vive en todo el mundo respecto a los trabajadores y trabajadoras, es necesario repensar el sentido del trabajo, la economía y la empresa, devaluados en nuestra sociedad. Para ello tenemos que exigir a los políticos, los gobernantes y los poderes económicos el derecho al trabajo, a una justa remuneración y a unas condiciones de vida dignas con horarios y condiciones que permitan el adecuado desarrollo de la vida personal, familiar y social.
Consideramos que el trabajo es esencial para la vida de las personas porque ayuda a construir nuestra humanidad. Es necesario insistir en que el trabajo humano está en función de la persona y no la persona en función del trabajo. (LE 6)
En la HOAC, nos sentimos llamados y llamadas, e invitamos a toda la sociedad a:
Romper la actual lógica de pensar y organizar el trabajo, poniendo en el centro a la persona.
Plantear el sentido y el valor del trabajo más allá del empleo: distribuir de manera justa y digna el empleo y reconocer socialmente todos los trabajos de cuidados.
Establecer unos ingresos mínimos suficientes para cubrir las necesidades básicas de todas las personas.
Unir de forma humanizadora el trabajo y el descanso.
Luchar por condiciones dignas de empleo, para humanizar el trabajo.
Repensar el modelo económico y productivo, para que sea respetuoso con la vida y el medio ambiente.
Como creyentes en Jesús de Nazaret afirmamos que el trabajo es para la vida. Por ello, animamos a promover el derecho a tener un trabajo decente para todas las personas.
Extraído de: https://www.hoac.es/2016/07/15/comunicado-orar-y-vivir-el-trabajo-y-las-situaciones-de-las-y-los-trabajadores-desde-la-misericordia/

HOAC: Cursos de Verano

“El modelo de precariedad laboral que mayoritariamente se ofrece a las personas trabajadoras es profundamente injusto y anticristiano”
Así lo ha manifestado el presidente general de la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC), José Fernando Almazán, en el transcurso de la rueda de prensa realizada esta mañana en la Residencia de los Padres Paúles de Santa Marta de Torres, Salamanca, acompañado de Fefi Valerón, responsable de formación de la HOAC, y Pepa Torres, teóloga y ponente en esta edición de los cursos de verano, donde participan 250 personas, “cuyo eje central es el trabajo decente” y que se enmarcan en la campaña “trabajo digno para una sociedad decente” que este movimiento está desarrollando en todo el país.
Para Almazán, “no es posible tener una vida digna, ni construir una sociedad justa, igualitaria ni decente” si la propuesta está basada tal y como hoy sucede “en condiciones de trabajo precarias y en la precarización continua de los derechos laborales”. Un modelo impuesto que “se extiende a la vida de los trabajadores debido a la importancia que el trabajo tiene para todas y todos como medio de subsistencia, de socialización, de creatividad… como principio de vida”, señala.
En este sentido, el presidente general de la HOAC ha subrayado que este proceso de cambio en la naturaleza del trabajo y de sus condiciones precarias, afecta a los jóvenes“convirtiendo en provisional, en precario: el trabajo, la emancipación, la vivienda, la vida en pareja, las posibilidades de tener hijos”. Afecta a las familias que “cada vez tienen más problemas para llegar a fin de mes” y con ello “la vida de las familias se hace también precaria”. Afecta a las mujeres que son desplazadas del trabajo para “ocuparse de los cuidados” y afecta a trabajadores inmigrantes, “expuestos a ser el chivo expiatorio sobre el que se intenta verter la culpabilización injustificable y la frustración de la gente que peor lo pasa”. Almazán ha apuntado que, globalmente, “los trabajadores y las trabajadoras, tienen más dificultades de vivir una vida digna, mientras que una minoría de personas es cada vez más rica”. Un proceso que no ha dudado en tildar de “escandaloso” y cuya característica es de “desigualdad y de pobreza creciente de la mayoría” frente a la “riqueza creciente de una minoría”.
Para la HOAC, movimiento de la Iglesia, que desarrolla desde hace años una labor de concienciación sobre la centralidad del trabajo digno y situar a la persona en el centro de las prioridades y, con ello, ser “la medida de la dignidad del trabajo” (CDSI 271). En este sentido, Almazán afirma que esta precarización del trabajo, “es inhumana y anticristiana. Nuestra fe, es radicalmente una propuesta de liberación para las personas. Dios se hace presente en nuestras vidas, vive a nuestro lado, sufre con nosotros, se alegra con nosotros y nos lanza a hacer realidad nuestra humanidad más profunda, la justicia, el amor, la solidaridad, el bien común. Desde la fe cristiana, la persona es la medida de todas las cosas”. Por tanto, existen razones éticas y religiosas, para cambiar la lógica de funcionamiento basada en un modelo precario: “que el trabajo sea un derecho de las personas, que esté repartido, que sea un espacio de realización personal y colectiva que permita a las personas contribuir a la construcción social con su esfuerzo, bien sea mediante el empleo o mediante el trabajo, y que la sociedad provea de los recursos a todas las familias para vivir con un mínimo de dignidad. Es posible hacerlo. Es cuestión de voluntad y de prioridades. Pero nos va la vida en ello. Nos va el modelo de sociedad y de convivencia en ello.”, ha apuntado.
En este camino de favorecer la centralidad de la persona y del trabajo digno, la HOAC lo hace también conjuntamente con otras organizaciones de la Iglesia, como son Cáritas, Justicia y Paz, CONFER, JEC, y JOC, todas ellas integrantes de la iniciativa “Iglesia por el trabajo decente”. En este sentido, Almazán ha anunciado la cita del “próximo 7 de octubre, también aquí en Salamanca, que con motivo de la Jornada mundial por el trabajo digno, desarrollarán diversas actividades”.
Seguidamente, ha intervenido la teóloga y ponente de los cursos, Pepa Torres, quien ha manifestado “que el ataque a las condiciones de  vida digna que están sufriendo los trabajadores y las trabajadoras es insostenible” desde una lectura a la luz de la Doctrina Social de la Iglesia o como subraya el papa Francisco “trabajar es propio de la persona humana. Expresa su dignidad de ser creada a imagen de Dios. Por eso se dice que el trabajo es sagrado” y fortalece fundamentalmente a la institución familiar. Torres considera que es fundamental “repensar el trabajo desde la lógica de la comunión”.
Finalmente, Fefi Valerón, ha anunciado para el jueves 14 de julio a las 19h, la celebración de una Eucaristía en la Catedral nueva, presidida D. Antonio Algora, obispo responsable de la Pastoral Obrera y, posteriormente, alrededor de las 20h unaconcentración (gesto público) en la plaza Anaya, para denunciar situaciones de precariedad laboral y vital y para reclamar “trabajo digno para una sociedad decente”. Actos abiertos a la participación de la ciudadanía salmantina.
Extraido de: https://www.hoac.es/2016/07/13/el-modelo-de-precariedad-laboral-que-mayoritariamente-se-ofrece-a-las-personas-trabajadoras-es-profundamente-injusto-y-anticristiano/

HOAC: Acto de presentación del nuevo libro de Ediciones HOAC «Trabajo y pobreza. Cuando trabajar no es suficiente para vivir dignamente»

Presentación del libro «Trabajo y pobreza. Cuando trabajar no es suficiente para vivir dignamente»
 
Madrid, 20 de junio de 2016
El próximo jueves 23 de junio a las 19 horas en la sala de conferencias de la cuarta planta del edificio que alberga nuestra sede (calle Alfonso XI, 4 – 4º) Madrid, la Hermandad Obrera de Acción Católica realiza la presentación pública de esta nueva publicación de Ediciones HOAC.
 
En el acto intervendrán:
■ Jesús Fernández, responsable de difusión de la HOAC
■ Fernando Vidal, patrono y miembro del Comité Científico de la Fundación FOESSA. Director del Instituto Universitario de la Familia de Comillas; y
■ Ana María Rivas, doctora en sociología. Profesora de antropología en la Universidad Complutense de Madrid. Autora del libro.
 
Con este libro Ediciones HOAC hace una aportación al debate sobre el relato vigente sobre el trabajo asalariado en una sociedad empresarizada como la nuestra, donde lo que menos cuenta es la vida humana y su dignidad, en palabras de la autora.
 
A lo largo de los seis capítulos que componen el libro, Ana María Rivas, describe aspectos como el proceso de empresarización de la sociedad; las transformaciones del trabajo y la producción de sujetos; la precarización laboral como tecnología de gobernanza neoliberal; la evolución de la pobreza y la exclusión social en España; el desempleo; las reformas, las políticas de austericidio y de pobreza laboral; los rostros de la precariedad, como son los jóvenes y el laboratorio de experimentación que se está haciendo de ellos; las mujeres: entre el techo de cristal y el suelo pegajoso; y las personas inmigrantes.
 
En este relato, Rivas ha utilizado datos de informes de FOESSA, del Barómetro Social de España, de Cruz Roja Española, de la Fundación Alternativas, de la Fundación 1 de Mayo, de Intermón Oxfam, de Save de Children o de UNICEF, entre otras referencias.
 
El libro concluye con la necesidad de reivindicar el trabajo decente, priorizando a la persona por encima de cualquier otra cuestión material. Por último, anima a la resistencia y la búsqueda de alternativas en este campo al proyecto neoliberal dominante.
 
Complementariamente, esta publicación constituye un recurso práctico muy importante tanto para la campaña «Trabajo digno para una sociedad decente» que la HOAC está desarrollando en todo el país, como también para los compromisos de esta organización en la iniciativa «Iglesia por el trabajo decente.»

HOAC, JEC, JOC, JUSTICIA Y PAZ: Iglesia por el Trabajo Decente

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Desde Iglesia por el Trabajo Decente queremos invitaros a participar en las acciones diocesanas que, con motivo del día 7 de octubre, Jornada Mundial por el Trabajo Decente, queremos impulsar en las diócesis con el objetivo de difundir este concepto acuñado por la sociedad civil y el magisterio de la Iglesia católica, para reivindicarlo y ponerlo en primera línea de la agenda política, social y eclesial.
Como decíamos en el díptico que os remitimos a primeros de mayo y que os volvemos a enviar ahora, “toda la comunidad cristiana está llamada a visibilizar y denunciar la situación de desigualdad en el acceso al trabajo decente y la negación de dignidad que esto supone. Todos y todas podemos hacer algo desde nuestras organizaciones, parroquias o lugares de compromiso. La defensa del trabajo decente es esencial para la realización de las personas y de las familias.”
Para esta ocasión, ofrecemos una serie de materiales que pueden ser usados adaptándose a la realidad de cada lugar, pero que quieren servir para generar una experiencia de coordinación y comunión entre distintas organizaciones de Iglesia, como ocurrió con la exitosa campaña del pasado año, y despertar la sensibilidad de todos los sectores de la sociedad. Los materiales que os enviamos adjuntos son los siguientes:

  1. Propuestas de diferentes actos públicos: actos de calle, mesas y foros de reflexión,…
  2. Un esquema para la celebración de una vigilia de oración.
  3. Un cartel para facilitar la convocatoria (personalizándolo en cada caso con los actos que se programen y las organizaciones que convoquen) y para la visibilización de la iniciativa en diversos espacios.
  4. Finalmente, el díptico sobre el trabajo decente que ya enviamos a primeros de mayo, así como la presentación de la Iniciativa y lo que pretendemos con ella

En todo caso, nos parece muy importante que, en lo que se pueda organizar de cara al 7 de octubre, estén presentes acciones tanto de oración-celebración como de manifestación pública de lo que como Iglesia defendemos en este campo.
Para más información, podéis dirigidos a la dirección de correo info@iglesiaporeltrabajodecente.org  y/o a la página web www.iglesiaporeltrabajodecente.org
 
Presentación_Qué es el Trabajo decente_ITD
Propuesta acciones 7 octubre 2016
Propuesta Vigilia 7 octubre 2016
Díptico Qué es el Trabajo Decente

HOAC: Cuando nos duela de verdad la vida de los pobres | #Editorial1584

Cuando nos duela de verdad la vida de los pobres | #Editorial1584
La legislatura que se inició con las elecciones del pasado 20 de diciembre ha sido una legislatura frustrada de la que necesitamos aprender, los partidos políticos y el conjunto de la sociedad, porque los pobres –hombres y mujeres– no pueden esperar.
En nuestro editorial de diciembre de 2015 decíamos que las elecciones nos situaban ante dos desafíos fundamentales: desarrollar la capacidad de diálogo desde la diversidad y situar la justicia en el centro de nuestra democracia. Las dos cosas han estado bastante ausentes hasta hoy. Previsiblemente después de las elecciones del 26 de junio habrá algunos cambios en la composición del Congreso y del Senado, pero en lo sustancial estaremos en la misma situación y con los mismos desafíos: la necesidad del diálogo para escuchar y responder al clamor de las personas empobrecidas, que es lo único que nos puede hacer avanzar en justicia y humanidad…, en fraternidad en definitiva.
En aquel momento señalábamos cuatro necesidades que debían centrar la labor del Parlamento y del Gobierno, y también de toda la sociedad: en primer lugar, vencer las causas estructurales de las desigualdades y de la pobreza; cambiar el modelo económico abandonando la ceguera del crecimiento planteado como fin en sí mismo y situando como objetivo un proyecto común de justicia social y solidaridad; situar como objetivo central el trabajo decente para combatir la pobreza y la desigualdad y para respetar y promover la dignidad de las personas; e impulsar una regeneración moral que recupere el valor del bien común al servicio de toda la sociedad. Hoy seguimos necesitando lo mismo[1].
La urgente regeneración moral de la democracia que necesitamos nos sitúa, a los partidos políticos, a las instituciones y a cada uno de nosotros y de nosotras, ante un desafío fundamental: reconocer y vivir que solo escuchando, asumiendo y respondiendo al clamor de las personas empobrecidas y excluidas, la vida social puede cambiar, la política puede cambiar, nuestras vidas pueden cambiar. Mientras no se resuelva esto no se resolverá ningún problema (cf. EG 202). Como dice Francisco, las cosas comenzarán a cambiar cuando «nos duela de verdad la sociedad, el pueblo, la vida de los pobres» (EG 205).
Responsabilidad de la Iglesia y de todos sus miembros es no dejar de proponer esto de la única manera que es creíble y que nos ayuda a crecer en humanidad: con el testimonio de una manera de vivir y actuar, la que nos invita a construir el Papa: «Cada cristiano y cada comunidad están llamados a ser instrumentos de Dios para la liberación y promoción de los pobres, de manera que puedan integrarse plenamente en la sociedad» (…) «La Iglesia, guiada por el Evangelio de la misericordia y por el amor al hombre, escucha el clamor por la justicia y quiere responder a él con todas sus fuerzas (…) lo cual implica tanto la cooperación para resolver las causas estructurales de la pobreza y para promover el desarrollo integral de los pobres, como los gestos más simples y cotidianos de solidaridad ante las miserias muy concretas que encontramos» (EG 187, 188).
[1] Reflexión sobre las elecciones. CP HOAC. Noticias Obreras, 1.570, abril 2015
Información extraída de: https://www.hoac.es/2016/06/13/cuando-nos-duela-de-verdad-la-vida-de-los-pobres-editorial1584/

HOAC: Presentación del libro «Trabajo y pobreza. Cuando trabajar no es suficiente para vivir dignamente»

Presentación del libro «Trabajo y pobreza. Cuando trabajar no es suficiente para vivir dignamente»
Trabajo y pobreza. Cuando trabajar no es suficiente para vivir dignamente de Ana María Rivas.
El próximo jueves 23 de junio a las 19 horas en la sala de conferencias de la cuarta planta del edificio que alberga la sede de la HOAC (calle Alfonso XI, 4 – 4º) de Madrid, la Hermandad Obrera de Acción Católica realiza la presentación pública del nuevo libro de Ediciones HOAC.
En el acto intervendrán:
■ Jesús Fernández, responsable de difusión de la HOAC
■ Fernando Vidal, patrono y miembro del Comité Científico de la Fundación FOESSA. Director del Instituto Universitario de la Familia, Comillas;
■ Ana María Rivas, doctora en sociología. Profesora de antropología en la Universidad Complutense de Madrid. Autora del libro.
■ Entrada libre, hasta cubrir el aforo.
■ Bus Puerta Alcalá | Plaza Cibeles ■ Metro <2> Banco España.
■ El libro estará disponible en este acto. También en la web de ediciones HOAC.
■ En redes sociales, utilizaremos la etiqueta #TrabajoyPobreza | @edicionesHOAC
Índice del libro
■ Presentación
■ Capítulo 1 • De la mercantilización a la empresarización de la sociedad.
■■ La primera gran transformación: la mercantilización de la sociedad.
■■ La segunda gran transformación: la empresarización de la sociedad.
■ Capítulo 2 • Las transformaciones del trabajo y la producción de sujetos.
■ Capítulo 3 • La precarización laboral como tecnología de gobernanza neoliberal.
■ Capítulo 4 • Pobreza, exclusión social y empleo.
■■ Evolución de la pobreza y la exclusión social en España.
■■ Desempleo y exclusión social.
■■ Cuando trabajar no es suficiente para vivir… dignamente.
■■ Reformas, políticas de austericidio y pobreza laboral.
■ Capítulo 5 • Los rostros de la precariedad:
■■ Los jóvenes: el laboratorio de experimentación.
■■ Las mujeres: entre el techo de cristal y el suelo pegajoso.
■■ Las personas inmigrantes: el muro de contención.
■ Capítulo 6 • Conclusiones: trabajo decente, trabajo digno.
Para más información: https://www.hoac.es/2016/06/06/presentacion-del-libro-trabajo-y-pobreza-cuando-trabajar-no-es-suficiente-para-vivir-dignamente/

HOAC: Repensar el sentido del trabajo | #Editorial1583

Repensar el sentido del trabajo | #Editorial1583
Se cumplen 125 años de lo que se considera el inicio de la Doctrina Social de la Iglesia. El 15 de mayo de 1891 el papa León XIII publicaba la encíclica Rerum novarum, sobre la situación de los obreros. Su contexto era el de un liberalismo radical y una expansión industrial capitalista que degradaron hasta el extremo las condiciones laborales y de vida de las familias trabajadoras. En esa situación, el Papa hacía un planteamiento fundamental sobre el trabajo humano: «A nadie le está permitido violar impunemente la dignidad humana, de la que Dios mismo dispone con gran reverencia; ni ponerle trabas en la marcha hacia su perfeccionamiento» (RN 30).
Un año antes, en 1890, tal y como se había decidido en el Congreso Internacional Socialista Obrero de París de julio de 1889, se convocó por primera vez la celebración internacional del 1º de Mayo, cuya reivindicación central era la jornada laboral de ocho horas. El éxito de las manifestaciones hizo que las organizaciones obreras decidieran dar continuidad a esta cita anual. Con el tiempo, el 1º de Mayo se convierte en un símbolo de la lucha y solidaridad de los trabajadores y las trabajadoras por el reconocimiento de su derecho a ser y a vivir dignamente. En la tradición obrera las «ocho horas de trabajo, ocho horas de descanso y ocho horas de formación», representaban «vuestro reingreso en la vida humana, la libertad de cumplir vuestros deberes hacia vosotros y hacia vuestra clase».
Si recordamos estos dos hechos es porque ambos apuntan hacia algo esencial que hay que subrayar: el trabajo es una necesidad radical del ser humano, vinculada a la dignidad de la persona; para ser y vivir es necesario un trabajo digno. Como dijo el papa Francisco en el Parlamento Europeo en noviembre de 2014, «es necesario sobre todo volver a dar dignidad al trabajo, garantizando también las condiciones adecuadas para su desarrollo». De la mano de un neoliberalismo tan fundamentalista como el del siglo XIX, que cree poder violar impunemente la dignidad humana, y de una cultura profundamente individualista y consumista, hemos sucumbido a una «idolatría del dinero» que mata, en palabras del Papa, porque lo somete todo a la rentabilidad económica, convirtiéndolo en producto de «usar y tirar», incluidas las personas. Las cada vez más precarias condiciones de trabajo son una de sus consecuencias más devastadoras para las personas, las familias y la sociedad. El trabajo está sometido a una esclavitud economicista que lo degrada, degradando con ello nuestra humanidad.
Necesitamos liberar el trabajo de esa esclavitud, pero la respuesta no vendrá mágicamente de la mano del crecimiento económico; menos aún por el camino del empleo en las condiciones que sea. Solo encontraremos una respuesta humana si buscamos caminos para «devolver la dignidad al trabajo» y para un trabajo digno y con sentido humano. Para ello es imprescindible repensar en profundidad el sentido que damos al trabajo. No puede ser un instrumento para la rentabilidad económica al ser una necesidad de las personas para vivir dignamente, desarrollar su humanidad y construir una sociedad justa y solidaria. Por eso, el empeño social fundamental debería ser que «todos puedan poner sus capacidades al servicio de los demás» para «contribuir al desarrollo de las personas y de la sociedad» (ISP 32). Esto implica y exige empleo en condiciones dignas y que la economía esté al servicio del trabajo y no lo contrario. El trabajo es «una necesidad, parte del sentido de la vida en esta tierra, camino de maduración, de desarrollo humano y de realización personal» (LS 128). El empeño para que el trabajo pueda ser «proyecto de humanización» es esencial para la vida digna de las personas y para una sociedad decente.
Véase: https://www.hoac.es/2016/05/12/repensar-el-sentido-del-trabajo-editorial1583/